miércoles, 23 de septiembre de 2009

Silencio



Silencio

Se que el silencio dice más que palabras y el mío me lo ha dicho todo sin decirme nada. Que no te lloren los ojos, que solo te llore el alma, el corazón se encoge buscando la calma. Luego no le preguntes si sabe amar o no si todo mi cariño el viento se lo llevó.Borraras todos mis sentidos y te iras como agua sobre la corriente de un río…mi silencio se quedará dormido allá donde muere el olvido y te dirá que el amor regresara con nuevas alas. Tu no quieres ninguna de tus alas ya no vuelan.Mi boca se calla agonizando un grito de desolación, en un eco maldito,dicen que dicen tantas cosas que ya eres incrédula de todas. Por decirte te dijeron que el amor era de la vida, lo más bello, y a ti sola, te arrastra a la oscuridad de los sueños, se marcan en tu alma como mil pisadas con saña, y entonces en mis ojos solo brotan las lágrimas.Muerdo mi lengua con rabia, no quieres maldecid ni quieres guardar ese odio en tus entrañas, cómo odiar lo que se ama y por qué tienes que sufrir por amor.Amanece cada día llueva o nieve, no muere el tiempo ni se alegran tus momentos. Ves que esta anocheciendo y nada cambia, tanto absurda melancolía ya te mata. Guardarte el sentimiento, camina sin mirar nada, quizás mañana, el silencio te diga palabras que ahora tú callas y contemplas que nada tiene importancia, ni siquiera el sentido, ni las miradas. Que estas solo, son palabras para emocionar al alma y derrumbar al corazón.
Escribo mis miedos ocultos, desconocidas ganas de vivir, todo sofocado por un miedo paralizante que me reprime de los deseos y provoca que cada una sea extraña para sí misma. La descripción es espantosa. Sin embargo, este sentimiento desconfiado es una realidad. Me parece magnífico que se plantee un panorama real de gente desganada por la vida por la inclemencia del tiempo. Los sueños entonces se vuelven ilusiones de cuentos medievales y los deseos, un absurdo. Es decir, si tengo miedo por vivir y, sin embargo, las circunstancias me obligan a vivir: o bien me dejo morir o bien intento sobrevivir (lo cual supone la superación del miedo).


Rompe el silencio la risa,
la palabra, que tiene la promesa
de la sonrisa.
No seas silencio, tan cruel,
que des esperanzas sin futuro.
En el vientre que fueron concebidas,
esperando recibir la vida.
Tiene mi vida,
necesidad de la tierna esperanza.
Silencio traidor,
deja que mis sueños
se plaguen de sonidos,
que me alegren el corazón.

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